Tu sesion de orientación es cosa de dos.
Me dedico y me encanta la orientación profesional pero es cierto que no todo el mundo ha tenido buenas experiencias tras haber acudido a un Servicio de Orientación como usuario. Quizás sea tu caso y hayas pensado que fue una pérdida de tiempo porque tus expectativas ni se cumplieron ni se aproximaron a lo que tú creías. Por supuesto, soy consciente de que cada opinión negativa lleva consigo matices, vivencias, experiencias ó simplemente buenas razones que pueden cuestionar las buenas prácticas de orientación, pudiendo ser desde luego muy respetables, porque aquí “la calidad ” también cuenta.
De forma muy sintética entiendo toda entrevista o sesión de orientación como un proceso comunicativo bidireccional, con todos sus elementos: código, receptor, emisor, canal, contexto situacional y un contenido cuyas consecuencias motiven el mensaje, pero además con dos características fundamentales que son la expresión emocional (sentimientos) y la valoración afectiva vía lenguaje verbal y no verbal por lo que carecer de ellos puede dar lugar a algo frío o estándar.
Por eso, si has decidido contar en el apoyo de un orientador en tu búsqueda de empleo algunas pautas e indicaciones te serán de utilidad para sacar mayor partido a tu cita.
Piensa en tu receptividad porque va a ser clave para que la sesión de orientación cause su efecto, normalmente a mayor receptividad mayor índice de movilizar actitudes, aptitudes y todo lo que esto conlleva, sin olvidar que el orientador debe y tiene que procurar un clima idóneo de confianza como base de su trabajo.
No tienes por qué saber de qué va esto. Si es tu primera cita y no eres informado de la presentación del servicio, pregunta en qué va a consistir y cómo se va a desarrollar el proceso de orientación, cómo funciona, etc. Ya estás mostrando interés.
Como en todo, y aunque no es ni mucho menos, una entrevista de trabajo, prepara tus inquietudes, tu intervención, tus dudas. Cuando vas al médico expresas qué te pasa, qué sientes, aquí es exactamente igual, será muy importante saber expresar en qué momento te encuentras, qué pasos has seguido, qué herramientas has utilizado y con qué frecuencia, cómo conseguiste contactar con empresas. Pero intenta vivirlo y emociónate para que tu orientador pueda sentirte en el mayor grado posible. Tal vez, y dependiendo en qué momento te encuentres dentro de tu estrategia profesional solo quieras puntualizar aspectos concretos de tu itinerario o tácticas que te han fallado. Plantéalo asertivamente para disfrutar de la motivación que tu orientador va a proyectar.
No te escondas. No actúes como si fueras un candidato en un proceso de selección, hoy no tienes ese rol porque nadie está seleccionando. Dialoga. Se trata de una entrevista semiestructurada e informal en algunos casos, donde lo importante es que la comunicación sea fluida y relajada, y si sientes que tus miedos internos han aflorado sin quererlo, no te preocupes porque de eso se trata.
Por último, ¿qué te voy a contar?…..Una sonrisa afectiva para despedirte siempre es muy gratificante, y desde luego tu orientador se la ha ganado.